De cara a 2026, los toldos y las persianas dejan de ser simples elementos funcionales para convertirse en piezas clave del confort, la eficiencia energética y el diseño de cualquier vivienda o negocio.
La tendencia es clara: más diseño, más sostenibilidad y más domótica.
Colores inspirados en la naturaleza, materiales técnicos que resisten mejor el clima y sistemas automatizados conectados al móvil y a la domótica del hogar marcarán el camino.
Tendencias en colores: de lo neutro elegante a los tonos naturales
1. Neutros cálidos: el nuevo estándar
Los clásicos blancos siguen presentes, pero ganan terreno los beiges, arena, piedra y topo.
Estos tonos:
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Combinan con casi cualquier fachada.
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No se ensucian visualmente tan rápido como el blanco puro.
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Transmiten serenidad y sensación de “hogar confortable”.
Son una apuesta segura para comunidades de vecinos, viviendas unifamiliares y terrazas de uso intensivo.
2. Verdes, terracotas y tonos tierra
Con la decoración inspirada en la naturaleza en pleno auge, los verdes oliva, salvia y musgo, así como los terracotas y marrones cálidos, serán protagonistas en 2026.
Ventajas:
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Encajan muy bien en casas con jardín, patios y hoteles rurales.
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Crean continuidad visual entre exterior e interior.
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Refuerzan la sensación de “oasis” en terrazas y porches.
3. Gris antracita y negro suave en persianas y cajones
En persianas (sobre todo aluminio y PVC) y cajones de toldos, el gris antracita y los negros suaves mate seguirán muy de moda:
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Dan un toque moderno y minimalista.
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Combinan bien con carpinterías de aluminio negras o gris oscuro.
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Aportan contraste sin resultar estridentes.
4. Rayas discretas y microestampados
Las rayas no desaparecen, pero se suavizan:
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Rayas finas tono sobre tono (beige + arena, gris + gris claro).
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Microestampados casi lisos que solo se aprecian de cerca.
El objetivo: romper la monotonía del liso, pero sin “cantar” demasiado ni pasar de moda en dos años.
Tendencias en materiales: resistencia, eficiencia y sostenibilidad
1. Tejidos técnicos de alta resistencia
En toldos, mandan los tejidos acrílicos tintados en masa y las lonas técnicas con tratamientos específicos:
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Alta resistencia a los rayos UV.
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Colores estables que no se degradan tan rápido.
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Protección térmica para reducir calor en el interior.
Cada vez más clientes buscan protección solar de verdad, no solo sombrear.
2. Tejidos microperforados y screen
Las lonas tipo screen o microperforadas siguen creciendo, sobre todo en:
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Fachadas con grandes ventanales.
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Balcones acristalados.
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Oficinas y locales comerciales.
Sus ventajas:
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Permiten ver hacia fuera, pero reducen deslumbramiento.
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Mejora del confort visual y térmico.
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Buen equilibrio entre luz natural y privacidad.
3. Persianas de aluminio con aislamiento mejorado
En persianas, el aluminio inyectado con espuma aislante seguirá siendo la estrella:
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Mejor aislamiento térmico y acústico.
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Mayor rigidez y durabilidad que el PVC en muchas situaciones.
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Opciones con cajones compactos y guías de alta estanqueidad, ideales para mejorar eficiencia energética.
4. Materiales más sostenibles y reciclables
La preocupación medioambiental se traslada también a toldos y persianas:
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Tejidos con fibras recicladas.
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Aluminio reciclable y procesos de producción más limpios.
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Tratamientos más duraderos para alargar la vida útil del producto.
Aunque el usuario final no siempre entra en detalles técnicos, la etiqueta “eco” y la durabilidad real empiezan a ser argumento de venta muy potente.
Automatización y domótica: del lujo al estándar
Si hay una tendencia clara para 2026, es esta: cada vez menos cadenas y cintas, y más motores y apps.
1. Motores integrados en persianas y toldos
La motorización se consolida como una opción casi básica:
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Motores tubulares integrados en el eje del toldo o persiana.
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Control mediante interruptor, mando a distancia o app.
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Menos esfuerzo físico, más comodidad y mayor vida útil del sistema (menos tirones, menos golpes).
2. Control desde el móvil y asistentes de voz
La integración con sistemas tipo Google Home, Alexa o Apple HomeKit será cada vez más habitual:
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Subir y bajar persianas desde el móvil.
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Abrir o cerrar toldos por voz.
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Programar horarios (bajar persianas al anochecer, subirlas al amanecer).
Perfecto para segunda residencia, personas mayores o simplemente quien quiera comodidad total.
3. Sensores de sol, viento y lluvia
En toldos, los sensores ganan protagonismo:
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Sensor de sol: baja el toldo cuando hay radiación fuerte.
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Sensor de viento: recoge el toldo automáticamente si sopla demasiado, evitando roturas.
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Sensor de lluvia: opcional para proteger textiles más delicados.
Esto no solo es confort: también es seguridad y ahorro, porque alarga la vida del toldo.
4. Integración con eficiencia energética
Persianas y toldos dejan de ser un elemento aislado: pasan a formar parte de la estrategia energética de la vivienda:
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Bajar persianas en las horas más calurosas para reducir uso de aire acondicionado.
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Aprovechar el sol en invierno levantando persianas a las horas de mayor radiación.
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Toldos que trabajan “en equipo” con sensores de temperatura interior.
En rehabilitaciones energéticas y obra nueva eficiente, este punto va a ser clave.
Diseños y formatos: más minimalismo, menos barroquismo
1. Toldos más ligeros y líneas rectas
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Cofres compactos que protegen la lona cuando está recogida.
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Brazos invisibles que dejan la fachada más limpia.
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Menos herrajes a la vista, más sensación de orden.
2. Persianas discretas y bien integradas
En persianas:
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Cajones integrados o semiocultos.
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Guías más finas pero mejor selladas.
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Estética coordinada con las ventanas y la carpintería.
El objetivo: que protejan mucho y se vean poco.
Qué buscan los clientes en 2026: confort, estética y retorno de inversión
Resumiendo, el cliente tipo en 2026 no solo quiere “un toldo” o “unas persianas”:
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Busca bajar la factura energética.
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Quiere una estética cuidada, acorde a la fachada y al interior.
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Valora la comodidad de automatizarlo todo.
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Y empieza a fijarse más en la durabilidad y la sostenibilidad.
Si vendes o instalas toldos y persianas, tu mejor discurso será una mezcla de:
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Diseño (colores y acabados).
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Confort (sombra, temperatura, privacidad).
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Tecnología (motores, apps, sensores).
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Ahorro (energía, mantenimiento, vida útil).
Las tendencias en toldos y persianas para 2026 se pueden resumir en tres palabras:
naturalidad, tecnología y eficiencia.
Colores inspirados en la tierra y la naturaleza, materiales técnicos cada vez más resistentes y sostenibles, y sistemas automatizados conectados a la domótica del hogar marcarán la diferencia entre un simple cerramiento y una solución moderna de confort y eficiencia.